Nuevas publicaciones 10/12/2013 (I) "Sorpréndeme" y (II) "Así somos"

 (I)

"Sorpréndeme"

Despiértame, en la mañana o durante la madrugada.
Salúdame cuando gustes, no tengas temor a saber si estoy, en soledad, con alguien, soñando, durmiendo; búscame, escríbeme, llámame y pregúntalo.
Hazme reír.
Invítame, bríndame todo por un día.
Trátame bien, trátame cursi, trátame mal.
Pellízcame, muérdeme, abrázame, bésame, insinúate y dime lo que quieres hacer conmigo.
Pero siempre, y por sobre todas las cosas... ¡sorpréndeme!
¿Será tu ego tan grande para no poder tener una atención para alguien que ya te demostró que también lo puede hacer contigo?
Es básico, elemental, sin complicaciones.
Ahora que sabes todo... ¡CRÉEME!
No voy a mover la montaña porque ya fui muchas veces hasta allá.
Para ti será fácil hacerlo todo, tal como el reflejo de un espejo.
Y si piensas que te vas a rebajar es porque no me valoras. Si eso te hace bajar de tu pedestal, entonces estamos en planos distintos.
El estilo moderno, del siglo XXI no va contigo; entonces la fortuna será de quien venga, será esa persona la que se coma tus maduras, el producto en bruto de tu madurez.
Y recuerda que, a pesar de haber crecido, nunca debes dejar de sorprenderte a ti mismo.

P.D. 1: "Como trates serás tratado".
P.D. 2: "Ama a tu prójimo como a ti mismo".
P.D. 3: "Da a cada quien lo que se merece".

(II)

"Así somos"

Así eres tú: con tu lápiz y tus creyones, vas dibujando a mis días sus albas y sus crepúsculos. Con perspicacia, vas creando, mejorando todo cuanto te rodea, lo que tocas, lo que ves; vas haciendo el bien sin mirar a quien. Con un borrador vas eliminando manchas, huecos, fallas y faltas en ellos, en ti, en mí. Sin duda, es como ver en "rewind" el video de Lily Allen - LDN.

Así soy yo: un "cacri" con estilo de "bulldog", necio, cascarrabias, tozudo y gruñón. Con suspicacia, voy suponiendo, juzgando erradamente lo que me rodea, lo que toco, lo que veo; dudando de ellos, de ti, de mí. Con certeza, mi realidad es la que se describe en la canción de Canserbero - Jeremías 17:5.

Y vienes tú con tu actitud amorosa, de calma y serenidad, de compañerismo y camaradería, a tender la sábana de quietud en mi caos. Vas y vienes, cambiando el verbo, a fuerza de paz, virtud y criterio. Me llenas de felicidad. Toda esa alegría la disfruto solo, soñando, tanto dormido como despierto; supongo que "los sueños son el reflejo de lo que queremos" y tú... tú eres mi sueño.